

¡¡Buenos días ciudadanos!!
Hoy vamos a hablar sobre una habilidad social que nos va a ayudar a sentirnos mejor con nosotros mismos y por ello, a obtener una vida más saludable: La Asertividad.
La Asertividad es la capacidad de expresar sentimientos y pensamientos con el objetivo de velar por nuestros intereses, nuestros derechos, pero sin tener la finalidad de dañar a la otra persona.
Ser asertivo va muy enlazado con tener una buena autoestima y seguridad en uno mismo. La persona asertiva mantiene un equilibrio entre sus derechos y de los demás. Defiende firme pero amable sus derechos personales sin pisotear a los demás.
La Asertividad es una habilidad y como tal puede ser aprendida y practicada.
Los beneficios de ser una persona asertiva son:
- Conseguir el objetivo de la interacción: a veces cuando tener una conversación con alguien al cual queríamos transmitir un mensaje no lo conseguimos porque la misma conversación te ha llevado a otra dirección. La asertividad te ayuda a focalizar y emitir el mensaje que tú quieres dar
- No llega a emociones negativa altas: ser asertivo nos ayuda a refrenar por ejemplo la ira
- Respeta los derechos de los demás: tiene en cuenta la posición del otro
- Nos ayuda a conseguir lo que queremos
- Nos ayuda a anteponer los derechos y preferencias nuestras
- Aumenta la autoestima
- Ser capaz de expresar nuestros gustos personales
- Resolver nuestros conflictos: la asertividad te ayuda a manejar un conflicto y a conseguir negociar sin llegar a discusión
- Decir NO son sentimientos de culpa: si te paras a analizar por qué nos cuesta decir no tiene que ver con el miedo a cómo el de enfrente puede reaccionar o qué pueden pensar de mí, entre otros
- Aceptar un cumplido: esto también es asertividad. ¿Por qué me cuesta tanto? Si hago bien un trabajo, ¿Por qué no puedo aceptar que es cierto, el reconocimiento?
Como puedes comprobar todo es positivo si aprendemos a ser asertivos.
¿Lo intentamos?